La Paz, 3 jul (Unicom – MDPyEP).- La producción de grano de trigo en Bolivia registró en 2021 un volumen de 336.223 toneladas métricas, la segunda cosecha más alta en la historia de Bolivia, que en relación con el año 2005 creció en un 253%, informó el ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca.
Al respecto, la autoridad explicó que el Gobierno nacional viene implementando medidas de apoyo a los productores agrícolas para incrementar la producción de trigo, en el marco de la política de seguridad y soberanía alimentaria, y el fomento al cultivo del grano.
“Para este 2022, el Gobierno nacional, a través de Emapa, estableció el precio de acopio de la tonelada de maíz en $us 390 como un incentivo para que nuestros productores puedan aumentar la siembra de trigo. Es el precio más alto en la historia de Bolivia”, sostuvo.
Huanca añadió que, entre otras medidas, la estatal Emapa apoya con la dotación de insumos y asistencia técnica a 1.250 productores de trigo, sector agrícola que también tiene la posibilidad de acceder a los créditos SIBOLIVIA con el 0,5% de interés anual para la producción con sustitución de importaciones o compra de maquinaria para mejorar el rendimiento, así como los incentivos tributarios para la importación de maquinaria agrícola con cero aranceles e IVA importación y comercialización.
“Entre otras medidas, a través del Programa Trigo, con la finalidad de facilitar trabajo de los productores, se tiene en implementación el ‘Proyecto de Construcción, Equipamiento e Instalación de la Planta de Almacenamiento de Granos de EMAPA, en el municipio Pailón, del departamento de Santa Cruz’, con una inversión de Bs 79,5 millones”, precisó.
Provisión de harina a panificadores
El ministro Huanca detalló que en la campaña 2020/2021 la estatal Emapa acopió 120.697 toneladas de grano de trigo, para la producción de 1,7 millones de quintales de trigo, en bolsas de 50 kilogramos, una producción que garantiza el suministro de harina al sector panificador en la gestión 2022, considerando que la demanda del sector alcanza a 1,6 millones de quintales.
En tanto que para la temporada 2021/2022, la autoridad adelantó que Emapa tiene previsto el acopio de 146.577 toneladas de trigo y la producción de 2,1 millones de quintales de harina, una producción que garantiza el abastecimiento de harina al sector panificador hasta el año 2023.
“Emapa actualmente entrega cuatro quintales por día por panificador, a un precio promedio de Bs 148 el quintal de 50 kg, para la producción de pan de batalla a precio justo a la población. Ratificamos que se mantiene el precio por regiones, según convenio suscrito con la Confederación Nacional de Panificadores Artesanos de Bolivia (Conapaabol)”, afirmó.
Detalló que el precio de pan de batalla se mantiene a Bs 0,50 en El Alto, La Paz y Cochabamba; Bs 0,40 en Oruro y Chuquisaca y Bs 0,33 en Potosí, según el acuerdo suscrito en enero de esta gestión entre EMAPA y la Conapaabol.
En el caso de Santa Cruz, la autoridad dijo que Emapa tiene como finalidad garantizar el abastecimiento de harina al sector panificador del país para la elaboración de pan de batalla, empero que a la fecha no se tiene solicitud del sector panificador de esta región del país, la misma que se debe realizar a través de la Conapaabol.
“A través de la confederación tendremos las reuniones que ameriten, sin imposición de plazos, para que un trabajo técnico que permita identificar cuál es el pan de batalla en Santa Cruz, el pan de mayor consumo, y así estudiar si amerita la provisión de harina de trigo que produce Emapa, porque la harina que abastece Emapa al sector panificador es subvencionada con recursos de las bolivianas y bolivianos”, precisó.
El titular de Desarrollo Productivo pidió a la población, en especial a las amas de casa, no dejarse sorprender por anuncios que buscan generar escenarios de agio y especulación de productos estratégicos y, finalmente, exhortó a los gobiernos municipales y subnacionales cumplir la función del control de peso y precios en los mercados, que son competencias constitucionales exclusivas de los gobiernos locales.